lunes, 15 de septiembre de 2014

Pistacho


Una nube de nostalgia cubre el cielo de este día, la lluvia que deja caer son las lagrimas que en mis ojos estarían si mi orgullo no fuera tan grande. Rememorar el pasado de vez en cuando no es algo humillante, pero si puede llegar a ser decepcionante. Recordar las promesas que alguna vez se hicieron y jamas se cumplieron, los bellos momentos que parecían no tener fin en el tiempo, entre tantas otras cosas que hacían de nos los cimientos de algo "eterno".

Los buenos recuerdos son las gomas que borran lo que el lápiz del triste y rencoroso presente escribe en mi alma, por  injustificadas razones que no se entienden. Hoy te recuerdo con nostalgia, la tormenta devasta mis cimientos, pero jamás lograra botarlos, porque, irónicamente, en su momento tu los hiciste fuertes.

No espero que leas esto algún día, pero si que te des cuenta de que muy en el fondo, a pesar de todo lo que nos distancio, independiente de quien fuera el responsable, tu recuerdo siempre permanecerá en mi persona. Y espero que mi recuerdo también quede grabado en la tuya, porque de que hubieron momentos felices, los hubieron.

Quizás en un futuro la vida nos vuelva a juntar, quizás esto termino y ya, nos queda un largo camino por recorrer, quizás nuestras manos se volverán a encontrar algún día, eso no lo se, y tampoco lo esperaría, pero ¿Quien sabe? a lo mejor mañana será el comienzo de un nuevo día.


Gracias por estos recuerdos.

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